En su apuesta por crear una fábrica inteligente, digitalizada y conectada, la planta de SEAT en Martorell ha implementado con éxito dos singulares robots colaborativos. Trabajan en la parte inicial de la cadena de montaje y son los encargados de poner en la puerta de la cajuela de los autos los nombres de los SEAT Ibiza y Arona a su paso por la línea, sin detener el proceso y compartiendo espacio con los operarios.
Los dos robots colaborativos, ubicados a ambos lados de la línea, colocan dos tipos de “lettering”: el del lado izquierdo selecciona y coloca los nombres Ibiza y Arona en función de cuál de estos modelos pase por la línea, mientras el del lado derecho se encarga de situar las siglas FR de los vehículos que tienen este acabado. Ambos robots están dotados de una mano diseñada para sujetar los diferentes tipos de letras mediante succión por ventosas, retirar el papel trasero protector, adherirlas al auto aplicando la fuerza exigida, quitar el protector delantero y tirarlo a un contenedor para su reciclaje.
Además, cuentan con un sistema de visión artificial que usan en varias ocasiones en este proceso para realizar un ajuste fino de la posición con el que se absorben desviaciones. Todo ello mientras el vehículo avanza por la línea de montaje. Gracias a esta novedad, la operación se realiza automáticamente y en movimiento, sin necesidad de trabajar a tacto parado.
La instalación está equipada con un “encoder” o dispositivo de control que le permite adaptarse a cualquier cambio de velocidad de la línea, con la complejidad que esto supone desde el punto de vista de programación. Y todo sin necesidad de tener vallado alguno que separe los robots de las personas que trabajan en la zona. Compartir el mismo espacio de trabajo es el factor diferencial de los robots colaborativos frente a los industriales, entre otros, como una menor velocidad de movimiento o su capacidad de reaccionar al contacto, para garantizar en todo momento la seguridad de las personas que trabajan junto a ellos.
Dr. Rainer Fessel, director de la fábrica de Martorell, afirma que “en SEAT avanzamos a paso firme para colocarnos a la vanguardia de la innovación. Los robots colaborativos nos permiten ser más flexibles, más ágiles y más eficientes, y suponen una muestra más de nuestra decidida apuesta por seguir siendo un referente en Industria 4.0”.
El vicepresidente Comercial de SEAT y CEO de CUPRA, Wayne Griffiths, indicó que “el incremento en las ventas sitúa a SEAT, un año más, como una de las marcas que más crece en Europa. Además, lo hacemos contra la tendencia del sector y aumentando de forma notable la cuota de mercado, lo que nos permite liderar de forma clara el mercado español y ser una de las marcas más vendidas en Alemania, el Reino Unido, Francia, Italia, Austria, Suiza, Portugal y México. Por su parte, CUPRA está atrayendo a nuevos clientes gracias al éxito de CUPRA Ateca y el muy buen rendimiento del actual León CUPRA”.
De enero a julio, las ventas de SEAT avanzaron por el fuerte impulso en sus mercados principales, en particular Alemania, Francia e Italia. En Alemania, SEAT entregó 82,300 vehículos hasta julio, un 15.2% más que en el mismo periodo de 2018. En España, SEAT comercializó 74,600 automóviles, un 2.2% más, siendo la marca más vendida. El top tres mundial de mercados lo completa el Reino Unido, donde la tendencia a la baja no frena a SEAT, que crece un 3.8% (43,200 autos vendidos). Francia e Italia completan la clasificación de mercados de mayor volumen para SEAT con 21,900 (+15.7%) y 17,200 vehículos entregados (+21.5%), ambos aumentando sus ventas a dos dígitos.